Tantas cosas

Tantas cosas que quería decirte, entre ellas que te quiero y que de verdad no alcanzas a imaginarte cuanto, simplemente te metiste en mi vida y llegaste a ser la parte más importante, sin que me de cuenta, sin pedirlo, y después se me dio la idea de cómo hacer para que seas feliz, sin darme cuenta que no era mi cerebro si no mi corazón el que quería que eso fuera así, que tal persona resulte ser, confundiendo ideas con sentimientos, haciendo lo lógico y no lo que de verdad lograría el objetivo, y bueno me empeñe en que feliz fueras y de la forma más inverosímil pero que yo suponía que funcionaria, lejos de mí, y como siempre me iba a salir con la mía, cueste lo que cueste.
Dolió, demasiado, de tenerte segura a mi lado te envíe a un mundo incierto, que tenias que descubrir y enfrentar sola, y aunque al marinero que le encargue te guie en ese viaje tenía precisas instrucciones el no supo qué hacer, claro se llevo el botín, lo más preciado, mi único tesoro, y no me di cuenta que nunca te volvería a ver, que mentira tan grande es que debes dejar ir a quien más quieres, es casi seguro que no vuelve. Y para colmo cuando ya te perdías en el horizonte me vine a dar cuenta de todo, insisto que tipo de ser humano soy, si los poetas interpretan mis acciones dirían que hice el máximo sacrificio, y la verdad así se siente, tienes todas las ganas de partir de este mundo, es un dolor que purifica, que clarifica toda tu vida, y hace parecer que todo tiene sentido, pero es solo una ilusión, provocada claro por las ansias y el hecho que esta una parte de ti muriendo, pero qué más da, aun estas vivo, y lo peor tienes que seguir, la costumbre obliga y la sociedad también, que más te queda.
Y por si un acaso no tengas suficiente, ese omnipresente ser que llaman destino al que le gusta hacerte acuerdo de tus errores con irónicas tretas, no te llevo lejos y me hizo mirar tu sufrimiento, aquel marinero no sabía cómo llevarte a ese destino ansiado por la humanidad, y tu sin saber a dónde ir, como bajar de ese barco, mas agónico que el atardecer eterno, despiadada escena en que los protagonistas no solo eran los actores si no también los espectadores, directores, tramoyistas y demás personal.
A veces por la ilusión que crea la forma de la tierra con el horizonte parecía que volvías, esas migajas de esperanzas que son solo ilusiones te hacen entender la grandeza del espíritu humano, y claro si con un grano de arena de esperanza puedes esperar la eternidad, imagina que puedes hacer con 2 gotas de felicidad, ahí está el secreto de la vida.
No es primera vez que te escribo y me imagino que lees esto, lo he hecho antes y aunque espero que esta vez sea distinto nunca de verdad has leído esto, solo me imagino que pasara al cerrar este círculo, de nuevo la racionalidad me juega sucio y crea escenarios en mi cabeza, que dices que me correspondes, que no pasa nada, que no me quieres ver más, y bueno que más puede pasar, que en mi cabeza no haya pasado ya, y no sé qué hacer para quitarme esa incertidumbre, nuevamente pienso en la muerte como mi solución, como muchos creen que después de la vida si tienes asuntos pendientes te quedas como espectro, y tu eres mi más grande asunto pendiente, así seguro y me quedo, pero esta vez sin tener que preocuparme de las mundanas necesidades terrenales como dormir o alimentarse, podría dedicarme a ti, a que de verdad ni el viento te toque, por que como te acordaras si soy celoso aunque no arme escenas, también no sería necesario prometer nada ante nadie, mi convicción sería suficiente para velar por ti y tu verdadera felicidad, como ya dije antes con dos gotas de felicidad un humano es capaz de todo, y para mí el poder cuidarte seria todo un mar de felicidad.
Dormiré, ojalá eternamente, así por lo menos algo cambie, y así dejaría de pensar en tantas cosas.